jueves, 25 de febrero de 2010

Cristales


Cristales... rompiéndose, haciéndose añicos, ¿Podéis oírlos?

Cuando cierro los ojos, cuando me quedo en silencio puedo oírlos, y entonces miro a mi alrededor en esta sala de estudios, pero no oigo nada, los ventanales siguen firmes y sólo oigo algún que otro carraspeo o quizás las palabras de algún despistado.

Pero cierro mis ojos cansados, cansados del tiempo, quemados por la cegadora luz de la pantalla, quemados por la incandescente luminosidad de Sol, y de la brillantez del reflejo de Luna, los dejo descansar tratando de meditar y puedo entonces oír el ruido de esos cristales, rompiéndose a trazos, a intervalos, como si fueran debidos al traqueteo de un tren, pero no, no, es algo mas rítmico, como si fuera por el sonido de una maquinaria que trabaja en mojado, sumergida en un liquido rojo y viscoso, y no, dudo que sea mermelada de fresa o zumo de tomate ese liquido en el que esta bañado, siento como los cristales se van despegando de las paredes de mi corazón y como se van adhiriendo al resto de mi cuerpo, clavandose en mis pulmones, haciendome jadear por el cansancio, el sobre esfuerzo de tener que portar con una maquinaria de cristal, tan pesada y a la vez tan frágil.

Los cristales siguen su curso, clavandose en mi estomago, haciendome un nudo en su interior, haciendo que las mariposas que pululan dentro se conviertan en avispones, los cuales cercenan el interior de mi ser con descontrolados ataques de sus aguijones. Esos cristales se acomodan en mi pecho contrayendolo, haciéndolo arder con tremendo fulgor, encogiéndolo y pegándolo a las paredes de mi corazón, el cual parece que se quiere escapar si pongo mi mano sobre él.

Cristales que nacen de una fuente cristalina, que no es otra que mi corazón, que ironía, llevo toda mi vida queriendo saber de que material estabas hecho, ya que eras capaz de soportar el fuego de Sol, y el agua de Mar, soportabas a Luz y a Oscuridad, y siempre sobrevivias... tal parece que era porque estabas fabricado en cristal de bohemia, una maquinaria tan bella, como una figurita recién torneada, reluciente y resplandeciente, lo suficientemente fuerte para poder portarte de un sitio a otro sin que te deshicieras entre mis manos como arena, pero en el fondo, sigues siendo de cristal, y al mas mínimo roce comienzas a soltar betas, cristalitos que se rompen y se sueltan en una bella sinfonía de sonido ...

Recuerdo que le decía a Luna que fundirme con ella me hacia sentir lo mismo que cuando un millón de vidrieras de colores se resquebrajaban al unisono... entonces no sabia el porque, quizá porque el que se deshacía era esta tonta maquinaria que porto.

Sin embargo, ahora no puedo dejar de pensar en ella, esa nueva luz, ese animal mestizo del que tanto me he encariñado, un animal único en su especie, al principio pensé que era como una yegua salvaje, o incluso como una leona enfurecida, sin embargo aun no he conseguido darle la forma definitiva en mi mente, me queda mucho por descubrir, ella es un conjunto de ilusiones y sueños que yacen latentes entre los huecos intertisciales que dejan los cristales, deseosos de salir y fundirse por completo en un solo ser en mi mente.

Por tanto, no puedo evitar que los residuos cristalinos hayan aumentado tanto en estas semanas, ya que los golpes se multiplican...que va, creo que crecen de una manera exponencial, ya que los hilos de nuestro destino son fuertes pero caminan sobre suelos quebradizos.

Porque si por mi corazón fuera, usaría todo lo que le queda de poder para unificar mis sentimientos hacia ella y lanzarse al vació, "vencer o morir" es su lema... la verdad que para ser de cristal y que un certero espadazo es suficiente para matarte, eres muy valiente corazón.

Sin embargo, ojala que esos cristales dejaran de romperse, y pensara un poquito mas con la cabeza tal y como ella hace, pero resulta tan difícil... si sólo necesito una sonrisa suya para olvidar mi dolor, solo necesito mirar sus ojos de cobre para saber que ella es especial, solo necesito ver la forma que toman sus mejillas redondeadas cuando sonríe para saber que quiero tenerla entre mis brazos, y besarla, sentir la dulzura de sus labios, la suavidad de su piel, poseerla y fundirnos en un solo ser... pero ya basta!

Corazón, te pasaste escribiendo, te estoy notando palpitar y casi a punto de salirte, y lo que sueñas es algo imposible, y para que negarlo, algo que tiene una probabilidad de causar daños mayores en ti que una bomba nuclear que explotara en tu interior, sin embargo no te rindes, verdadera mente eres un loco suicida, pero piensa mi, que los cristales que se te despegan de tu piel cada vez que te hacen daño se me clavan en mi cuerpo, causándome heridas irreparables y daños incurables y que nunca me han dejado de hacer sufrir. Piensa en mi...como yo pienso en ti...

Adrián_William

25 de Febrero de 2010

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